Investigación & Desarrollo
Por Valentina Cortés Lehuei , 14 de septiembre de 2022 | 13:50La investigación detrás del descubrimiento del Rayadito Subantártico
Conoce la experiencia de Constanza Napolitano, doctora de la ULagos quien participó del hallazgo de esta nueva nueva especie.
Interesante y enriquecedor para su experiencia profesional y personal fue para la investigadora de la Universidad de Los Lagos, Constanza Napolitano, haber trabajado en lo que fue el reconocimiento científico de una nueva especie, el ave conocida como Rayadito Subantártico o Aphrastura subantarctica.
Dicha especie fue descubierta en el extremo sur de Chile, específicamente en un archipiélago denominado Islas Diego Ramírez, ubicado a unos 100 kilómetros más al sur de Cabo de Hornos, una especie parecida al conocido rayadito del continente, pero con características diferentes.
La pregunta que se hicieron entonces el equipo de investigadores del Centro de Investigación Cabo de Hornos, o conocido como CHIC (por sus siglas en inglés) , fue ¿Cómo esta especie de Rayadito, que se encuentra en el continente pudo llegar hasta esas islas tan apartadas y con condiciones climáticas tan adversas, con vientos que sobrepasan los 100 kilómetros por hora?
El comienzo de un gran descubrimiento
La investigadora y académica del Departamento de Ciencias Biológicas y Biodiversidad de la Universidad de Los Lagos, quien dirige el Laboratorio de Genética de la Conservación, Constanza Napolitano, explica que la investigación surge hace aproximadamente seis años cuando un grupo de investigadores comenzó a visitar la isla Diego Ramírez para realizar estudios de biodiversidad.
En esas visitas notaron que había una población de aves terrestres del rayadito, pero en un hábitat totalmente distinto y con una forma un poco más robusta que el que se conocía hasta entonces y que habita en el continente.
Fue cuando surgieron una serie de estudios, utilizando tres aproximaciones que fueron fundamentales: ecológica y conductual, morfológica y genética, en esta última participó la investigadora, determinándose así que se trataba de una nueva especie.
Según explica la investigadora, a pesar de que el rayadito provenía del continente, este había tenido una serie de cambios y adaptaciones que la hacían ser una especie nueva, un grupo único y demográficamente independiente.
“Cuando visitaron estas islas vieron la población de rayaditos y les llamó la atención cómo habían podido llegar hasta ahí, pajaritos que en su distribución continental pesan 12 gramos y se conocen por anidar en cavidades de troncos de árboles en los bosques, pero en las islas Diego Ramírez no hay árboles, sino pastos o hierbas largas", comentó la académica.
Napolitano informó además cómo estas aves han debido adaptarse al lugar donde se encuentran.
“En esa isla existen pocos insectos que es su alimentación en el resto del continente, con un clima muy adverso, ráfagas de viento que superan los 100 kilómetros, se estima que están cambiando su dieta y consumiendo crustáceos por la escasez de insectos en ese lugar", mencionó.
En este sentido aclaró que esta aves son “un poco más robusta que la conocida hasta ahora en el continente, de unos 16 u 18 gramos, el pico más ancho y la cola más corta, todas estas adaptaciones debido a que ha tenido que comer cosas más duras y además poseen una cola más corta porque no necesita volar grandes distancia”, explicó.
El hallazgo
La Dra. Napolitano señala que luego de analizar los aspectos ecológicos de hábitat, donde no hay árboles y anidan en el suelo en medio de las hierbas, además de ver la aproximación morfológica, que son mediciones de rayaditos del continente y los de la isla Diego Ramírez y los cambios en el ave se puede hablar del descubrimiento de una nueva especie.
Toda información que fue revisada por especialistas, siendo datos considerados como concluyentes por Scientific Reports para determinar la existencia de esta especie el “Rayadito Subantártico”.
“La información genética nos puede entregar datos respecto de cuán similar genéticamente o conectada está una población con otra. En este caso se comparó la genética de las poblaciones del continente con los individuos encontrados en las islas Diego Ramírez y lo que se ve es que no hay conexión, migración, o flujo génico actual entre el continente y la isla, por lo tanto es una población que ha estado totalmente aislada durante miles de años”, sostiene.
Agrega que “Los rayaditos de Diego Ramírez comparten una variante genética histórica con la población más al sur del continente, la de Cabo de Hornos, por lo que uno puede inferir que desde allí salió a colonizar este nuevo lugar, y que el nuevo grupo ha permanecido en Diego Ramírez bastante tiempo para que logren características genéticas distintas”, indica.
Luego de este hallazgo una de las próximas acciones, según explicó la investigadora de la Universidad de Los Lagos, es clasificar en qué categoría de conservación se encuentra esta nueva especie, cuya población es pequeña, dado el poco espacio que tienen en esas islas.
“Lo importante sería poder protegerla, por ejemplo del peligro que significaría que un depredador llegue a la isla, teniendo en cuenta cómo ha avanzado hacia el sur el visón, pero también podrían ser otras amenazas como gatos o perros” finalizó Napolitano.