Día Mundial del Reciclaje: "Como consumidores somos responsables"

Integrantes de agrupaciones ligadas al medio ambiente abordaron la realidad que se vive en esta materia en las regiones de Los Lagos, Los Ríos y Aysén.

La importancia de avanzar en materia de educación, es uno de las principales desafíos en que coinciden representantes de distintas organizaciones ligadas al tema medioambiental en el sur del país, según comentaron en el marco del Día Mundial del Reciclaje, este 17 de mayo.

La fecha, instituida por Unesco, tiene como fin recordar la estrategia de Reducir, Reutilizar y Reciclar, cuyo objetivo es reorientar el comportamiento de la sociedad para mejorar el medio ambiente.

María Isolina Obando que forma parte de Ecomundo Osorno, emprendimiento familiar que trabaja en el reciclaje, considera que la percepción social al respecto dista de la responsabilidad individual y apunta a que erróneamente se cree que reciclar se trata de cambiar un basurero por otro, o que las empresas hagan su trabajo respecto a los residuos.

“Como consumidores somos responsables de los envases y embalajes que vienen en nuestras compras. Y, por lo tanto, también deberíamos disponerlos de forma correcta para que entren al proceso de reciclaje”, explica a Diario Sostenible.

Obando comenta que en los puntos verdes hay residuos limpios de quienes conocen el proceso, pero también botellas a medio llenar, cajas que tienen leche, y hasta han encontrado animales muertos, lo que da cuenta de una falta de educación en la materia, que termina perjudicando al reciclaje.

Tipos de residuos

Cynthia Jara es integrante de Corallina, agrupación sin fines de lucro de la Región de Los Ríos, que hace divulgación científica sobre las ciencias del mar, educación ambiental y limpieza de playas, puntos donde encuentran principalmente vidrios, latas de aluminio y colillas de cigarros.

Comenta a Diario Sostenible que hay diferentes agrupaciones en Valdivia que se encargan de trabajar con residuos de reciclaje, y estima que lo que falta es avanzar en comunicar y divulgar acerca de esta materia, haciendo talleres para fomentar el reciclaje y enseñar cómo hacerlo de forma de manera efectiva.

Añade que otro de los puntos pendientes es la desconexión con las comunidades.

“Generalmente, estos puntos de reciclaje están en lugares que, si bien son estratégicos, son súper pocos. Entonces, muchas veces se desconoce dónde poder dejar vidrios o plásticos”, indica Jara.

En esta línea, recuerda que no todos los residuos son reciclados. Precisa que, en la zona de Valdivia, la gente puede disponer para este fin cajas de leche, botellas plásticas, latas de aluminio, papeles y cartones, además de desechos orgánicos como restos de frutas y verduras que son transformados en compost. 

Compostaje

Diario Sostenible también conversó con Marianela Molina, quien participa en el Movimiento de Defensa por el Acceso al Agua, la Tierra y la Protección del Medioambiente (Modatima) de la Región de Aysén.

Según Molina, en ese territorio solo hay una empresa privada que ha hecho un convenio y “ha trabajado bien”, pero no hay ninguna instancia del Estado en el tema de reciclaje.

“Lo que nos hace falta es partir por la educación en la comunidad, y algo sumamente importante sería comenzar con el compostaje, que reduce significativamente la basura domiciliaria en un 50 a 60%. Incluso en algunos hogares, dependiendo de la alimentación, podría llegar al 70%”, subraya Molina

Añade que en la región se podría hacer mucho más. “Somos 100.000 habitantes y podríamos tener un reciclaje mucho más alto. Sí se hace localmente, por ejemplo en Tortel y Villa O’Higgins”, comenta.

Molina explica que esto no ocurre en ciudades más grandes como Coyhaique o Aysén, cuyos habitantes botan más basuras que van casi en su totalidad a los vertederos que están colapsados, por lo que se requiere de una mirada de mediano y largo plazo en materia de reciclaje.

La integrante de Modatima agregó que, en las dos principales ciudades de la región hacen falta ordenanzas municipales que exijan a tiendas, supermercados y farmacias nacionales que reciclen los cartones y plásticos que botan a la basura, y que representa un gran porcentaje de los residuos de esas localidades.