Statkraft anuncia que desiste de proyecto hidroeléctrico Osorno

La empresa noruega confirmó su retroceso de la polémica construcción que se emplazaría en una zona con alto nivel cultural y espiritual mapuche. El proyecto de pasada Los Lagos aún persiste.

Tras un largo proceso de diálogos y reestructuración del polémico proyecto hidroeléctrico “Osorno”, la empresa noruega de energía “Statkraft Chile”, anunció este 19 de enero su decisión de no llevar a cabo dicha central, la cual estaba en un proceso de reevaluación, producto del impacto que tenía en el sitio de significación cultural la Morada del Señor Kintuante.

El proyecto se instalaría en el río Pilmaiquén, a 36 kilómetros de Osorno, en el límite entre las regiones de Los Ríos y Los Lagos, una zona valorada por comunidades mapuches-huilliche y que produciría un impacto significativo en la Morada del Señor Kintuante (Kgen Mapu Kintuante).

Según las creencias del pueblo, en ese lugar habita el Ngen Kintuante, un ser espiritual por lo que es considerado un lugar sagrado. 

La gerenta general de Statkraft Chile, María Teresa González, informó que la decisión de la empresa se basa en proteger este espacio cultural- espiritual y el respeto de los pueblos indígenas.

“Creemos en el diálogo y en la voluntad de encontrar espacios de acuerdo. Esta decisión responde al compromiso que adquirimos hace años con las familias Lepuneras, de revisar los posibles efectos del proyecto y, sobre todo, de resguardar un espacio sagrado”, destacó.

La empresa informó que además de su renuncia al proceso de reevaluación ambiental, desistirá también de todos los derechos de agua asociados a este proyecto. 

Persistencia del proyecto Los Lagos

La compañía aclaró tras la decisión, que aún se mantiene en pie la construcción la central hidroeléctrica de pasada Los Lagos, la cual se encuentra ubicada en la misma cuenca del río Pilmaiquén con más de un 70% de avance.

Según indicó la compañía esta iniciativa no afectaría la Morada del Señor Kintuante, debido a que se encuentra alejada de esta zona.  

Por su parte, comunidades indígenas se han mostrado en contra de este proyecto, justificando que afectaría espacios naturales sagrados y el patrimonio cultural.